Bosquejo:
Gálatas 5:1-6
Introducción:
Apocalipsis 17:6 “Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro.”
Juan 1:14 “Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad”.
1. Mantenerse firme en la libertad Cristiana (v.1)
a. La posición de nuestra disposición.
Romanos 6:17-18 “Pero gracias a Dios, que aunque erais esclavos del pecado, habéis obedecido de corazón a aquella forma de doctrina a la cual fuisteis entregados; 18 y libertados del pecado, vinisteis a ser siervos de la justicia”.
b. La persistencia de nuestra disposición.
Efesios 6:11-13 “Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. 12 Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. 13 Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y habiendo acabado todo, estar firmes”.
1 Corintios 16:13 “Velad, estad firmes en la fe; portaos varonilmente, y esforzaos”.
2 Tesalonicenses 2:15 “Así que, hermanos, estad firmes, y retened la doctrina que habéis aprendido, sea por palabra, o por carta nuestra”.
2. Mantenerse firme contra el yugo de la esclavitud. (vs.2-4)
a. La definición de la esclavitud. (v.2)
Cita: “El legalismo humano conduce a la autojustificación. Esta niega la necesidad de la gracia salvadora y habilitadora de Cristo. La justicia humana abraza la más cruel de las mentiras de Satanás: que una persona puede ser justa por obedecer la ley. Si eso fuera cierto, no habría habido necesidad del nacimiento, la vida, la muerte y la resurrección de Cristo.” - Paul Tripp
Juan 14:15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos”.
Juan 10:27 “Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen,”
b. La deuda de la esclavitud. (vs.3,4)
Filipenses 3:5 “circuncidado al octavo día, del linaje de Israel, de la tribu de Benjamín, hebreo de hebreos; en cuanto a la ley, fariseo;”
Hechos 7:58 “...los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo”.
Hechos 9:3-6 “...oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? 5 Él dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues...”
- La ley es capaz de condenarte.
- La ley es incapaz de salvarte.
Romanos 8:3 “Porque lo que era imposible para la ley, por cuanto era débil por la carne, Dios, enviando a su Hijo en semejanza de carne de pecado y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne;”
Gálatas 3:10
3. Mantenerse firme con la esperanza de la Salvación . (vs.5,6)
a. La esperanza por el Espiritu . (v.5)
Efesios 1:13-14 “En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa, 14 que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria”.
b. La esperanza por la Fe. (v.6)
1 Juan 4:20 “Si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto?”
Romanos 13:10 “El amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la ley es el amor”.