La Confianza en la Cruz
Introducción:
Romanos 8:24-28 "Porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve, no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo?25 Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos. 26 Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.27 Mas el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos. 28 Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados."
1. La certeza de la promesa de Dios.
a. El cristiano tiene confianza.
Hebreos 6:18 “para que por dos cosas inmutables, en las cuales es imposible que Dios mienta, tengamos un fortísimo consuelo los que hemos acudido para asirnos de la esperanza puesta delante de nosotros.”
Tito 1:2 “en la esperanza de la vida eterna, la cual Dios, que no miente, prometió desde antes del principio de los siglos,"
b. El cristiano está “convencido”.
Romanos 4:21 “plenamente convencido de que era también poderoso para hacer todo lo que había prometido;”
Filipenses 1:6 “estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo;"
2. Lo completo de la promesa de Dios.
a. “Todas las cosas”.
b. Las circunstancias de la vida del cristiano.
- Algunas circunstanicas:
- Las cosas agradables obran para nuestro bien.
Romanos 2:4 “¿O menosprecias las riquezas de su benignidad, paciencia y longanimidad, ignorando que su benignidad te guía al arrepentimiento?"
- Las cosas tristes obran para nuestro bien.
Génesis 50:20 “Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien, para hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida a mucho pueblo."
- Las cosas de Satanás obran para nuestro bien.
2 Corintios 12:7-10 “... me fue dado..., un mensajero de Satanás... Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad..."
- Las cosas pecaminosas obran para nuestro bien.
Lucas 22:31-34 “…y tú, una vez vuelto, confirma a tus Hermanos…"
3. La condición de la promesa de Dios.
a. La promesa no es para cada creyente.
Job 42:1,2 “Respondió Job a Jehová, y dijo: 2 Yo conozco que todo lo puedes, Y que no hay pensamiento que se esconda de ti.”
Mateo 28:18 “Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra."
b. La promesa está basada en la capacidad de Dios.
Juan 10:9 “Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos."
4. El compromiso de la promesa de Dios.
a. El propósito de la promesa de Dios.
2 Corintios 12:8 “…tres veces he rogado al Señor, que lo quite de mí…”
Job 38:4 “¿Dónde estabas tú cuando yo fundaba la tierra? Házmelo saber, si tienes inteligencia.”
Efesios 2:10 “Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas."