Gálatas 5:22-23
Introducción:
Éxodo 34:6 “Y pasando Jehová por delante de él, proclamó: ¡Jehová! ¡Jehová! fuerte, misericordioso y piadoso; tardo para la ira, y grande en misericordia y verdad;”
Efesios 4:26 “Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo,”
1. La perseverancia de la paciencia.
2 Corintios 6:4 “antes bien, nos recomendamos en todo como ministros de Dios, en mucha paciencia, en tribulaciones, en necesidades, en angustias;”
Santiago 5:10 “Hermanos míos, tomad como ejemplo de aflicción y de paciencia a los profetas que hablaron en nombre del Señor”.
A. El propósito de Dios produce perseverancia.
• Perseveramos para corregirnos.
Hebreos 12:6-7 “Porque el Señor al que ama, disciplina, Y azota a todo el que recibe por hijo. 7 Si soportáis la disciplina, Dios os trata como a hijos; porque ¿qué hijo es aquel a quien el padre no disciplina?”
Jeremías 51:20 “Martillo me sois, y armas de guerra; y por medio de ti quebrantaré naciones, y por medio de ti destruiré reinos”.
• Perseveramos en desafiarnos a nosotros mismos.
Salmos 119:71 “Bueno me es haber sido humillado, Para que aprenda tus estatutos”.
• Perseveramos para ser usados por Dios.
Génesis 50:20 “Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien, para hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida a mucho pueblo”.
B. La prioridad de Dios provee perseverancia.
Romanos 8:28-29 “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados. 29 Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos”.
Cita: “En la adversidad, le pedimos a Dios que elimine el problema en lugar de utilizarlo.”
2 Corintios 12:7-9 “Y para que la grandeza de las revelaciones no me exaltase desmedidamente, me fue dado un aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca sobremanera; 8 respecto a lo cual tres veces he rogado al Señor, que lo quite de mí. 9 Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo”.
3. Las práctica con la paciencia.
A. La promesa de la ama.
2 Pedro 3:9 “El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento”.
1 Timoteo 1:16 “Pero por esto fui recibido a misericordia, para que Jesucristo mostrase en mí el primero toda su clemencia, para ejemplo de los que habrían de creer en él para vida eterna”.
B. La promesa de la segunda venida.
Santiago 5:8 “Tened también vosotros paciencia, y afirmad vuestros corazones; porque la venida del Señor se acerca”.
2 Pedro 3:13-15 “Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia. 14 Por lo cual, oh amados, estando en espera de estas cosas, procurad con diligencia ser hallados por él sin mancha e irreprensibles, enpaz. 15 Y tened entendido que la paciencia de nuestro Señor es para salvación; como también nuestro amado hermano Pablo, según la sabiduría que le ha sido dada, os ha escrito,”.
1 Tesalonicenses 4:13-18